Apple cambiaría sus planes con la fabricación del Watch: esto es lo que sabemos

Apple ha dado un paso atrás en uno de sus proyectos: la fabricación de sus propias pantallas para el Apple Watch. Tras aproximadamente siete años de trabajo en este proyecto, la compañía ha decidido rendirse y dejar de intentarlo, según informes recientes.

La noticia, que fue revelada por el analista de Bloomberg, Mark Gurman, destaca el fin del proyecto, conocido internamente como T159, que tenía como objetivo reducir la dependencia de fabricantes externos como LG Display y Samsung SDI, dos de los principales proveedores de pantallas para los relojes inteligentes de la compañía.

Desde sus primeros días, Apple ha mostrado una inclinación por tener control sobre todos los aspectos de sus productos. Esto se refleja en su histórica transición de chips diseñados por terceros a sus propios procesadores, como los chips Apple Silicon que impulsan los dispositivos más recientes de la compañía. Sin embargo, esta filosofía de control total no siempre resulta exitosa.

Apple se rinde con sus propias pantallas

Aunque el desarrollo de los procesadores propios ha tenido éxito, mejorando el rendimiento de sus dispositivos, la compañía habría desistido de la producción de sus pantallas y continuaría trabajando junto a compañías de terceros.

A pesar de sus esfuerzos durante siete años y la apertura de una planta en Santa Clara, California, el proceso de fabricación resultó ser más complicado de lo esperado.

El objetivo de Apple era implementar la tecnología de pantalla microLED en futuras generaciones del Apple Watch, lo que se consideraba un salto significativo en la experiencia de visualización. Las pantallas microLED ofrecen ventajas como un mayor brillo y una mejor resistencia a la degradación en comparación con las pantallas OLED utilizadas actualmente en los dispositivos.

Sin embargo, el proceso de fabricación de pantallas microLED resultó ser demasiado complejo y no apto para la producción en masa. A pesar de los esfuerzos de la compañía y de los empleados dedicados al proyecto, Apple finalmente tomó la difícil decisión de abandonarlo.

La noticia del abandono del proyecto de pantalla para el Apple Watch llega poco después de otra decisión importante de la compañía: cancelar su proyecto de desarrollar un automóvil eléctrico, conocido como Project Titan. Estos contratiempos plantean interrogantes sobre la estrategia a largo plazo de la empresa y su capacidad para tener mayor control sobre la producción de los componentes de sus dispositivos.

En cuanto al impacto humano de esta decisión, se espera que algunos empleados del proyecto de pantalla para el Apple Watch sean transferidos a otras divisiones dentro de la empresa, mientras que otros serían despedidos y compensados.

Apple es demandada en Estados Unidos

La demanda, presentada ante el Tribunal de Distrito de Nueva Jersey, alega que Apple ha monopolizado ilegalmente el mercado de los teléfonos inteligentes en violación de la Sección 2 de la Ley Sherman de Defensa de la Competencia. Y entre las prácticas señaladas por la justicia estadounidense se incluyen:

Bloquear aplicaciones de transmisión en la nube para cosas como videojuegos.

Suprimir la calidad de la mensajería entre el iPhone y plataformas competidoras como Android

Limitar la interoperabilidad de los relojes inteligentes de terceros con sus iPhone y dificultar que los usuarios de Apple Watch cambien debido a problemas de compatibilidad.

Impedir que desarrolladores externos creen billeteras digitales competidoras con funcionalidad de tocar para pagar para iPhone.

Interrumpir las “súper aplicaciones” que abarcan muchos programas diferentes y que podrían degradar la “fiabilidad de iOS” al facilitar a los usuarios de iPhone el cambio a dispositivos de la competencia.

Según las autoridades de la nación norteamericana, esta estrategia por parte de Apple no solo reforzó ilegalmente su monopolio en el mercado de teléfonos inteligentes y accesorios relacionados, sino que también limitó la libertad de elección y las opciones disponibles para el consumidor final.

Fuente: Infobae