VIDEO | Denuncia que le desvalijaron la casa, fue amordazada y recibió una brutal golpiza

Fernanda Damico denunció que un hombre la atacó cuando salió de su casa, ubicada en Caseros y Ejército de los Andes, a sacar la basura, la retuvo amordazada por más de tres horas, la golpeó ferozmente y le desvalijó la casa.

Marisel Quiroga Damico, hija de la víctima, relató que el episodio ocurrió este lunes por la noche en la casa de su madre. “El ladrón la golpeó, abusó de ella, la amordazó y la asfixió con una frazada, estuvo al borde de la muerte, cuando se fue y pudo reaccionar pidió auxilio a la Policía”, contó.

“Al tipo de más de 30 años lo detuvieron a dos cuadras de la casa de mi mamá, cuando ella pide ayuda, con las valijas, el televisor y pocas de las pertenencias que ya se había robado. La Policía solo le pone ‘robo y lesiones’ en la caratula, siendo que la amenazaba en todo momento con gritos en el oído que decía ‘qué estaba esperando para morirse’”, detalló la hija.

Además, la familia de la víctima puntualizó que este miércoles el ladrón fue puesto en libertad y “nunca vieron las fotos de ella desfigurada, no la llamaron tampoco a declarar, estuvo cautiva por más de 3 horas y ellos lo dejaron muy por arriba como si no hubiera pasado nada”.

En este sentido, Quiroga Damico dijo que “la única solución que le dieron es ponerle una orden de restricción para que el tipo no se le acerque”.

“Mi mamá ahora está en la casa de mis hermanos, ya fue dada de alta pero está traumatizada, se siente a la deriva porque sabe que fue liberado, en sus momentos de tranquilidad se acuerda de todo lo que le pasó pero no está bien, además, no tiene contención, se siente vulnerable”, indicó.

El fiscal de Instrucción N°3, Esteban Roche, está a cargo de la investigación del caso.

“La asfixió, la amordazó, la ato de las manos que las tiene reventadas, en su momento parecía un globo las manos de ella de lo hinchadas, por ratos volvía a asfixiarla y abusarla, mientras que él estaba en el comedor drogándose”, insistió en cuanto al episodio que le tocó vivir a su madre.

Y recordó que cuando fue la Policía hasta la casa de la damnificada “había cerveza y una caja de vino blanco sobre la mesa, siendo que mi mamá no toma ni cerveza ni vino. Había cucharas quemadas como que él mismo se hubiera estado cocinando cocaína o la droga que consumió”.

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