Tesla va a anunciar el despido del 10% de su plantilla en los próximos días. Elon Musk no lo ha desmentido.
Es la consecuencia de los malos resultados de los últimos meses, y de algunas decisiones personales de Elon Musk (sí, Cybertruck, te señalamos a ti), que van a salir muy caras a la compañía. Por no hablar de que la industria china ya ha adelantado por la derecha a la empresa de Elon Musk.
Con una línea de vehículos que ya tiene unos cuantos años, Tesla se enfrenta a un futuro complicado, mientras Elon Musk pone las miras en un negocio diferente a los vehículos mainstream: los robotaxis.
Tesla despide a 14.000 trabajadores
Según informa Reuters, en un memorándum destinado a sus empleados al que el medio ha tenido acceso, Elon Musk anuncia el despido del 10% de la plantilla de Tesla:
«A medida que preparamos la empresa para nuestra próxima fase de crecimiento, es extremadamente importante examinar todos los aspectos de la empresa para reducir costes y aumentar la productividad», afirma Musk en el comunicado a los trabajadores.
«Como parte de este esfuerzo, hemos llevado a cabo una revisión exhaustiva de la organización y hemos tomado la difícil decisión de reducir nuestra plantilla en más de un 10% a nivel global».
Entre los despidos, se encuentran dos importantes ejecutivos: el jefe de desarrollo de baterías, Drew Baglino, y el vicepresidente de política pública, Rohan Patel.
Estos despidos son consecuencia de los malos resultados de la compañía de Elon Musk en el último trimestre, en donde, por primera vez en cuatro años, el número de coches vendidos se redujo, con respecto al mismo periodo del año anterior.
Y eso que Tesla ha bajado el precio de sus vehículos en 2023, con lo que también ha reducido el margen de ganancia.
Ahora Tesla se enfrenta a numerosos problemas, que no son fáciles de resolver. Su línea de vehículos ya tiene unos años, y aunque son perfectamente válidos, los usuarios buscan novedades.
En los últimos años su única novedad ha sido el Cybertruck, un vehículo nicho cuya fabricación en masa es un dolor de cabeza, porque no usa piezas convencionales. Para colmo de males, el Tesla Model 2 barato que iba a llevar el coche eléctrico a las masas, supuestamente ha sido cancelado:
Ahora Musk ha puesto las miras en un nuevo mercado, aún más lleno de incertidumbres: los robotaxis. Un negocio salpicado de minas de profundidad en forma de falta de regulación, normativa estricta, y los problemas de fiabilidad del piloto automático de los Tesla. No parece un mercado para ganar dinero a corto o medio plazo, todo lo contrario.
Pero lo más preocupante para Tesla, y para toda la industria automovilística de coches eléctricos occidental, es el espectacular avance de los coches eléctricos chinos.
La industria china es la única que ha entendido que lo que los mercados, y el planeta, necesitan, no son cybertrucks, ni vehículos eléctricos de lujo el doble de caros que los de combustible. Lo que ahora se necesita son coches eléctricos fiables y baratos, y eso es exactamente lo que están construyendo… y vendiendo con éxito.
Por primera vez una empresa de coches china, BYD, ha vendido más coches eléctricos que Tesla en 2023. Y por un amplio margen: 3,02 millones, frente a 1,81 millones de la marca de Elon Musk.
Tesla va a despedir a 14.000 trabajadores en los próximos días. Corren malos tiempos para la compañía, y no se vislumbran soluciones a corto plazo.
Fuente: Computer Hoy
