VIDEO | Incertidumbre entre beneficiarios del Plan de Inclusión por su continuidad en el gobierno de Poggi

Los beneficiarios del Plan de Inclusión Social, que cumplen tareas en dependencias del Estado, se mantienen en estado de alerta por su continuidad laboral cuando cambie la gestión del Gobierno provincial.

Como la Ley para pasar a los trabajadores al plantel de contratados del Gobierno no prosperó en la Legislatura, el gobernador Alberto Rodríguez Saá decidió, en septiembre, otorgarles una remuneración semejante a la Categoría F del escalafón general. Con los aumentos salariales que recibió la administración pública desde entonces, cobrarán en noviembre 375 mil pesos, aproximadamente.

Lo que los beneficiarios desconocen es si seguirán cobrando ese monto, o si, en cambio, volverán a percibir los haberes de los trabajadores de las parcelas, a partir del 10 de diciembre.

“Faltan muy poquitos días para que asuma el nuevo gobernador (Claudio Poggi); hay mucha expectativa, la gente nos pregunta…Yo creo que la provincia no está mal (económicamente) como dicen; estamos esperando el cambio de Gobierno, nuestra sugerencia  sigue siendo la misma: estamos a la par de gente con la que cobramos lo mismo, pero nosotros cobramos en negro, no tenemos ni aportes jubilatorios”, señaló Roberto, uno de los beneficiarios que encabezó las protestas en septiembre para que sean pasados al plantel del Estado.

“Hacemos la misma tarea que gente contratada o con planta permanente. Le pedimos al gobernador que entra que nos reconozca como los trabajadores, que nos dé la planta permanente, la Categoría, y los beneficios que tenemos que tener, como los aportes y un recibo de sueldo”, agregó.

Roberto señaló que todavía no saben qué será de su futuro. “Los compañeros hoy en día no se levantan tranquilos porque realmente faltan muy poquitos días para que se cambie el mandato y no sabemos qué es lo que va a pasar con nosotros”, graficó.

Contó también que desde la gestión entrante no se comunicaron con ellos para darle alguna pista sobre la continuidad o no de su vínculo con el Estado.

Consideró, de todos modos, que el próximo gobernador “no va a querer problemas con el Plan de Inclusión” y, advirtió, que se mantendrán en la pelea para no perder los derechos obtenidos hasta ahora.