El Salón de la Fama de cualquier actividad es un recinto virtual al que acceden solo los personajes más destacados. Se los elige mediante el voto de un jurado a partir de sus méritos; habitualmente hombres y mujeres retirados de sus labores, a quienes les llega el reconocimiento cuando ya peinan canas o, incluso, de forma póstuma. El ejemplo más reciente para nuestro país es el de Manu Ginóbili, del básquet en el 2022.
La buena nueva es que otro deportista nacional será distinguido, ya que Sergio Martínez fue anunciado como uno de los 21 elegidos de la Clase 2024 para el Salón de la Fama del Boxeo de Atlantic City, en ceremonia a realizarse en septiembre. Maravilla había integrado una lista de candidatos en el 2019, pero no llegó. Cuatro años más tarde, confirmaron que le darán la llave de oro.
Sergio Maravilla Martinez contra Macaulay McGowan en el 2022.
En paralelo, también es una caricia al boxeo argentino. no alcanzan los dedos de una mano para contar a los púgiles nacionales que esperan a Martínez en un Salón integrado por 140 boxeadores: solo figuran Carlos Monzón, Nicolino Locche, Víctor Galíndez y Pascual Pérez. Como colaboradores -nómina en la que sobresale Sylvester Stallone- se incluyó a Tito Lectoure y Amílcar Brusa.
Maravilla y su tatuaje “resistencia”.
Maravilla, a punto de cumplir 49 años, mostró la brillantina de sus guantes a lo largo de su carrera, con un pico en el 2012, el recordado peleón en Las Vegas ante Julio César Chávez Jr, a quien le arrebató el cinturón de los medianos del Consejo. El bonaerense supo ganar tres cetros de las cuatro asociaciones más importante de este deporte; los otros dos, cuando venció por puntos a Kelly Pavlik en el 2010, justamente en Atlantic City, donde será reconocido ante los ojos del mundo.
En el otro brazo, “victoria”.
Es que sucede eso: a Maravilla lo consideran mucho más afuera que en nuestro país. Durante su regreso del 2020 al 2023, con voluntad, gimnasio y a contramano de la edad, trató de desandar un camino que desembocara en un nuevo título. Lo hizo ante rivales lógicos, no letales noqueadores, a los que sí enfrentaría al final de un sendero que, al cabo, se le cerró antes: la ansiada pelea se cayó.
En el trayecto, parte de la “crítica” lo cuestionó. Al respecto, le dijo a Olé: “Si lo critican a Messi, por qué no lo harían conmigo”. En ambos casos, la fama no es cuento…
Fuente: Infonoticias
