Prisión domiciliaria por cuatro meses para un hombre que atropelló y mató a un motociclista

Felipe Martín Iglesias, el hombre de 65 años que atropelló y mató a un motociclista en la esquina de 25 de Mayo y Caseros, tendrá que cumplir prisión domiciliaria por 120 días.

Así lo dispuso el juez subrogante del Juzgado de Garantía N° 2, Juan Manuel Montiveros Chada, este lunes, al formularle cargos por “homicidio culposo agravado por la conducción imprudente y negligente de un vehículo a motor y por haberse dado a la fuga y no intentar socorrer a la víctima”.

Atropelló y mató, y se dio a la fuga

El 16 de diciembre, a la madrugada, Iglesias atropelló con su Fiat Cronos a Pablo Ayala, un motociclista de 37 años. En la moto también viajaba Agustina Arrieta.

“Iglesias, que había estado en una juntada en la Tercera Rotonda, aproximadamente a las 04:20 horas, a bordo de su automóvil rojo, circulando en dirección este a oeste por calle 25 de Mayo y al llegar a la intersección con calle Caseros, no observó, y por ende no frenó, que en sentido norte sur por Caseros venia una motocicleta Honda Modelo XR 250, aproximadamente a 29 kilómetros por hora que era conducida por Ayala teniendo como acompañante a Arrieta de 27”, relató el fiscal de Instrucción N° 3, Esteban Roche.

Y agregó: “En dicho contexto y cuando la motocicleta ya había transcurrido la mitad de la esquina, Iglesias embiste con su rodado a la moto en su lateral izquierdo sector medio trasero. El impacto hizo caer la moto junto a sus ocupantes, arrastrándola unos once metros y medio sobre la carpeta asfáltica, quedando tendido Ayala sobre la carpeta asfáltica y Arrieta sobre el cordón oeste de calle Caseros”.

De acuerdo a la acusación de la Fiscalía, el conductor del automóvil se bajó del rodado, observó la escena y luego se dio a la fuga por 25 de Mayo. El choque le produjo a Ayala traumatismo de cráneo con pérdida de masa encefálica y falleció en el lugar del hecho. Arrieta fue trasladada al Hospital Carrillo con lesiones de carácter leve.

Roche acusó a Iglesias, también, de lesiones culposas en perjuicio de Arrieta; y solicitó 60 días de prisión preventiva y subsidiariamente cuatro meses de domiciliaria para él.

La familia de la víctima estuvo representada por el abogado Jorge Sosa, quien adhirió al pedido de la Fiscalía pero entendió que la calificación debía ser homicidio simple con dolo eventual, solicitud que finalmente fue rechazada por el juez. La defensa técnica del imputado, a cargo de Santiago Calderón Salomón, pidió por su parte que la imputación fuera por homicidio culposo simple.